Durante el transcurso de nuestras vidas conocemos un sinfín de personas, en diferentes circunstancias, por diferentes motivos y claro, de diferentes maneras. Antes de conocer a esas personas, no teníamos idea de cómo eran, qué hacían o cuales eran sus preferencias. Muchas veces somos "obligados" por nuestras ocupaciones a compartir tiempo con personas desconocidas, es entonces que tenemos nuestra primera impresión, que podría clasificarse en tres: agradable, desagradable, indiferente.
Continuaré con la línea de las personas que nos parecieron agradables, ya que hay más probabilidades de hacer amistad con una persona que nos agradó la primera vez de que con la que no. Intercambiamos nombres, e-mail, teléfono, opiniones, buscamos similaridades, y.... oh, antes que lo percibamos compartimos otras actividades, además de las "obligatorias", he ahí pues el comienzo de una amistad.
En la línea de los desagradables (aquellos que no se encajan con nuestros parámetros propios de "amigo ideal"), habrá siempre algunos que en ocasión posterior harán algo que nos haga cambiar radicalmente de punto de vista, de modo que "aquello" desagradable del principio, se torne "una insignificancia" a lado de lo que hizo por nosotros o por otra persona, de ahí esperamos con cierta "ansiedad" una nueva oportunidad para un acercamiento, en fin, comenzar una amistad.
Sin embargo, qué significa amistad?, evidentemente es una tarea muy compleja definir la amistad, sin embargo, como casi siempre, una respuesta compleja a veces tiene una respuesta bastante simple, en fin, para mí, amigo o amiga es aquella persona que está dispuesta a hacer lo que sea necesario por el bien de su prójimo, incluso dar la vida si es necesario. Te acepta como eres y te dice sin medias tintas lo que necesitas mejorar, te censura y te anima, te estimula y te critica.
Para cultivar una buena amistad por lo tanto es muy importante mantener una buena comunicación, ojo que no estoy diciendo mantener mucha comunicación, sino, buena comunicación, es decir, una comunicación de buen nivel, profunda, sin barreras, de modo que a pesar de que ves a tu amigo luego de años, puedes hablarle sin impedimentos a pesar de eso y estar seguro de que te entenderá.
En la proxima ocasión, hablaré un poco sobre la teoría de los créditos y débitos en las relaciones personales.
Un fuerte abrazo.
domingo, noviembre 27, 2005
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